¿Sabías que…..
para estudiar los trastornos del sueño y la somnolencia diurna se utiliza la Polisomnografía ?
Los estudios polisomnográficos se pueden llevar a cabo durante el horario de sueño habitual del individuo, es decir, durante la noche, o durante el día para cuantificar la somnolencia diurna. Los estudios polisomnográficos se realizan en las llamadas Unidades del Sueño.
En los estudios polisomnográficos se usan con frecuencia el test llamado Test de latencia múltiple (MSLT= Múltiple Sleep Latency Test), y el RTSW (Repeated Test of Sustained Wakefulness) o test de vigilia sostenida. En el primero el sujeto se le acuesta en una habitación sin luz y se le indica que no haga esfuerzos para no dormirse. En el segundo, el de vigilia sostenida RTSW, se coloca al individuo en una habitación sin ruidos y con poca iluminación y se le dice que permanezca despierto.
Para valorar los problemas del dormir se mide la Latencia del sueño, es decir, el tiempo requerido por el sujeto para dormirse expresado en minutos. En otros casos lo que interesa saber es la capacidad del individuo para mantener la vigilia, o sea, la capacidad de la persona para mantenerse despierta.
Otros parámetros polisomnográficos que hay que tener en cuenta a la hora de diagnosticar un trastorno del sueño o del dormir son:
- la continuidad del sueño. El promedio total de sueño y vigilia durante una noche. Una buena continuidad de sueño indica un sueño consolidado y con pocos despertares; una continuidad de sueño peor indica un sueño interrumpido por bastantes despertares.
- los despertares intermitentes. El tiempo que se permanece despierto, una vez iniciado el sueño expresado en minutos.
- la eficacia del sueño. Es el cociente entre el tiempo dormido y el tiempo que la persona ha permanecido en la cama.
- la arquitectura del sueño. Es el número y distribución de los estadios específicos de sueño. Es decir, las proporciones de sueño REM y de sueño NREM (en minutos).
Por último, añadir que los trastornos del sueño pueden ser por falta de sueño, como en el Insomnio, o por exceso de sueño, como en la Hipersomnia.
(Editado por la Dra. Moya Guirao)