según un estudio reciente, un estilo de vida saludable se asocia con un mejor funcionamiento cognitivo en los adultos mayores ?
Los investigadores descubrieron que las personas que seguían una dieta mediterránea, basada en frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos y aceite de oliva, obtenían puntuaciones más altas en las pruebas de función cognitiva, incluso teniendo signos de Alzheimer u otra demencia en el cerebro, En otras palabras, un estilo de vida más saludable se asoció con una mejor función cognitiva.
Se analizaron datos sobre factores el estilo de vida, pruebas cognitivas y la evaluación neuropatológica completa antes de la muerte. Para valorar el estilo de vida, se tuvieron en cuenta los siguientes factores: tabaquismo, al menos 150 minutos de actividad física por semana, consumo de alcohol y dieta de Mediterránea.
Para la obtención de la puntuación cognitiva global se utilizaron los resultados de una batería de diecinueve pruebas estandarizadas. Con respecto a la patología cerebral, se incluyó la carga de proteina ?-amiloide, los ovillos de tau fosforilada, la patología global de la Enfermedad de Alzheimer, otras patologías cerebrales vasculares, demencia de los cuerpos de Lewy, esclerosis del hipocampo y proteína de unión al ADN TAR 43.
En este estudio de cohorte se usaron datos de un estudio clínico-patológico longitudinal, con datos de autopsias de 586 difuntos, 415 eran mujeres, 171 eran hombres, y siendo la edad media al morir de 90,9 años.
El estudio al que estamos haciendo referencia en este artículo, publicado en JAMA Neurology y titulado “Healthy Lifestyle and Cognition in Older Adults With Common Neuropathologies of Dementia“, ha sido dirigido por Klodian Dhana, MD, PhD, Rush University Medical Center, Chicago, Illinois, EE.UU.
¿Sabías que….. el consumo de alcohol y tabaco puede causar graves enfermedades?
El tabaco es la principal causa de cáncer de pulmón, representando el 25% de todas las muertes por cáncer a nivel mundial. El consumo de tabaco está asociado con el 92% de los cánceres de tráquea, bronquios y pulmón en los hombres, y al 62% en las mujeres. Los fumadores pasivos también tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedades pulmonares.
Las personas que consumen alcohol y tabaco tienen un riesgo 5 veces mayor de desarrollar cánceres de cavidad oral, orofaringe, laringe y esófago en comparación con las personas que consumen alcohol o tabaco solo. Los fumadores tienen hasta 22 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de pulmón en comparación con los no fumadores.
Por otro lado, en el año 2018 alrededor de 92. 000 muertes por cáncer en Europa estuvieron relacionadas con el consumo de alcohol.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Europa tiene la mayor proporción de bebedores y la mayor ingesta de alcohol del mundo, causando casi un millón de muertes al año. El consumo de alcohol ocasiona, además de ciertos tipos de cáncer, trastornos neuropsiquiátricos, enfermedades cardiovasculares, cirrosis hepática, etc. El consumo de alcohol durante el embarazopuede dañar al feto, dando ,lugar a graves discapacidades físicas y mentales (Síndrome alcohólico fetal).
Además, el abuso en la ingesta de alcohol es una de las principales causas de años de vida laboral perdidos y, por lo tanto, de daño a la economía de los países.
A lo anterior hay que añadir que el consumo de alcohol aumenta el número y la gravedad de los accidentes de tráfico.
La disminución del alcoholismo y del tabaquismo supondría una mejor calidad de vida, menos muertes por enfermedades ocasionadas por estas sustancias y un considerable ahorro en el gasto sanitario.
Según la OMS los beneficios de dejar el tabaco son casi inmediatos. Después de solo 20 minutos de dejar de fumar, la frecuencia cardíaca desciende. En 2 a 12 semanas, mejora la circulación y aumenta la función pulmonar. Dentro de 1 a 9 meses, la tos y la falta de aire disminuyen. Después de 10 años de dejar de fumar, el riesgo de cáncer de pulmón se reduce a aproximadamente la mitad que el de un fumador.
según un estudio reciente beber café y té por separado o en combinación se asoció con un menor riesgo de accidente cerebrovascular (ICTUS) y demencia ?
Con anterioridad hemos publicado en estas páginas otros estudios sobre la influencia de la ingesta de café o té en el desarrollo de demencia. Pues bien, la presente investigación se ha centrado en estudiar la combinación de café y té y el riesgo de accidente cerebrovascular, demencia y demencia posterior a un accidente cerebrovascular.
Este estudio titulado “Consumption of coffee and tea and risk of developing stroke, dementia, and poststroke dementia: A cohort study in the UK Biobank“, dirigido por Yuan Zhang, ha sido publicado en la revista científica PLOS Medicine.
La presente investigación incluyó a 365. 682 participantes, de 50 a 74 años, del Biobanco del Reino Unido. Una parte de los participantes se unieron al estudio en el año 2.006, y otra parte se incorporó en el 2.010, y a todos ellos se les hizo un seguimiento hasta el año 2020.
Todos los participantes auto-informaron su ingesta de café y té al inicio del estudio.
La muestra utilizada se ajustó por sexo, edad, etnia, ingresos, índice de masa corporal (IMC), actividad física, alcoholismo, tabaquismo, dieta, consumo de bebidas azucaradas, lipoproteínas de alta densidad (HDL), lipoproteínas de baja densidad (LDL), antecedentes de cáncer, antecedentes de diabetes, antecedentes de enfermedad arterial cardiovascular e hipertensión.
Durante los años que ha durado el estudio 5.079 participantes desarrollaron demencia y 10.053 participantes tuvieron un accidente cerebrovascular.
Los investigadores encontraron que la ingesta de café de 2 a 3 tazas al día o de té de 3 a 5 tazas al día, o la ingesta combinada de 4 a 6 tazas al día de café y té se asociaba a un riesgo más bajo de accidente cerebrovascular y demencia en comparación con los que no bebían café ni té. Además, la combinación de té y café se asoció con un menor riesgo de demencia post accidente cerebrovascular-
Así lo afirma el nuevo índice “The Bloomberg Global Health Index For 2021“, publicado recientemente . En los indices del año 2019 y 2020 también aparecía España en primera posición.
Para la realización del Indice Bloomberg se tienen en cuenta la esperanza de vida, la sanidad, el acceso al agua potable, la contaminación, la alimentación, etc. Otros factores como la obesidad o el tabaquismo se contabilizaban como variables negativas, y por lo tanto restan.
Un resumen del Indice Bloomberg 2021 es como sigue:
País…………………………… Grado de salud…………………Habitantes 2021
alrededor del 50% de los fumadores de tabaco morirá por causas directamente relacionadas con el tabaquismo, y que los fumadores de tabaco tienen una esperanza de vida10 años menor que las personas que nunca han fumado?
La mayoría de los fumadores adultos lamentan haber comenzado a fumar, y son muchos los fumadores que intentan dejar de fumar, pero menos del 10% lo consigue. Si una persona deja de fumar se reduce sustancialmente los riesgos para su salud, riesgo que es aun menor si abandona el tabaco antes de los 40 años.
En año 2019 alrededor 155 millones de personas de entre 15 y 24 años eran fumadores de tabaco, con una pre-valencia del 20,1% entre los hombres y del 4,95 % entre las mujeres. En los siguientes países la cifra era aun más alta (más del 33%): islas del Océano Pacífico (Kiribati, Estados Federados de Micronesia, Papua Nueva Guinea, Islas Cook y Nauru), Bulgaria, Croacia, Letonia, Francia, Chile, Turquía y Groenlandia. Entre los países con una población de más de 1 millón de habitantes la pre-valencia del consumo de tabaco entre los hombres fue más alta en los siguientes: Timor-Leste, Papua Nueva Guinea y Turquía , y entre las mujeres la pre-valencia fue más alta en Bulgaria, Chile y Croacia.
La pre-valencia del consumo de tabaco disminuyó significativamente entre 1990 y 2019. Entre los hombres la disminución fue del 32,9% , y entre las mujeres fue del 37,6%. Las mayores disminuciones del tabaquismo ocurrieron en Noruega, Australia y Brasil, y, por el contrario, en Albania, Bosnia-Herzegovina, Serbia, Afganistán, Líbano, Bahrein, Lesoto, Arabia Saudita, El Salvador, Zambia, Antigua y Barbuda, y Uzbekistán aumentaron.
En cuanto al número total de fumadores varones, se produjo el mayor incremento en India, Egipto e Indonesia. En cuanto a las mujeres fumadoras de 15 a 24 años el mayor crecimiento ocurrió en Turquía, Jordania y Zambia.
La iniciación al consumo habitual de tabaco ocurre predominantemente en la juventud. A nivel mundial la edad media del comienzo es a los 19,2 años. Se estima que el 65,5% de los fumadores actuales adultos de 20 a 54 años empezaron a fumar regularmente antes de los 20 años de edad, y el 18,5% de ellos comenzó a fumar a los 15 años.
según un estudio reciente el aislamiento social está asociado con un mayor riesgo de enfermedad coronaria (infarto de miocardio) o de accidente cerebro-vascular (ICTUS)?
La investigación a la cual nos estamos refiriendo, titulada “Social isolation and risk of heart disease and sytroke: analysis of two UK prospective studdies”, ha sido publicada recientemente en la revista científica The Lancet Public Health.
En el estudio participaron 938.558 participantes con una edad media 63 años, 481.946 sujetos del Estudio Million Women con una edad media 68 años y 456.612 individuos con edad media 57 años del Biobanco del Reino Unido. La muestra estudiada no tenía enfermedad coronaria previa ni antecedentes de ICTUS.
El nivel de aislamiento social lo catalogaron en tres niveles: vivir solo, contacto con familiares o amigos y/o participación en actividades grupales. También se tuvieron en cuenta los siguientes datos: edad, sexo, nivel de estudios académicos, región del país en la que habitada el individuo, tabaquismo, consumo de alcohol, índice de masa corporal, actividad física y salud (auto-evaluada por el mismo sujeto).
Los investigadores realizaron un seguimiento promedio de 7 años. En este periodo hubo 42.402 primeros episodios de enfermedad coronaria (de los cuales 1.834 fueron mortales sin un ingreso hospitalario asociado) y 19.999 primeros episodios de accidente cerebrovascular o ICTUS (de los cuales 529 fueron mortales sin un ingreso hospitalario asociado).
El resultado del estudio fue como sigue:
1.- Poca o ninguna asociación entre el aislamiento social y el ingreso hospitalario por una primera enfermedad coronaria o un accidente cerebrovascular (ICTUS).
2.- El riesgo de muerte por enfermedad coronaria o por ICTUS (accidente cerebrovascular) sin un ingreso hospitalario asociado fue mayor en el grupo más aislado que en el grupo menos aislado
3.- La enfermedad coronaria (Infarto de miocardio) o la muerte por accidente cerebro-vascular como primer evento fue más alta en los participantes que vivían solos frente a los que no vivían solos. Los que tenían más contacto con familia, amigos o grupos sufrían menos infartos de miocardio e ICTUS.
Además, el aislamiento social aumenta enormemente el riesgo de que el primer evento de infarto de miocardio o de ICTUS lleve a la muerte antes de llegar al hospital, particularmente entre las personas que viven solas, quizás debido a la ausencia de ayuda inmediata para responder a un ataque cardíaco agudo o a un ICTUS, en los que la rapidez en prestar ayuda médica es fundamental.
las personas con bajo nivel socio-económico tienen más enfermedades atribuibles al alcohol que los sujetos con alto nivel socio-económico que consumen cantidades similares de alcohol?
Lo anterior se conoce como la paradoja del daño por alcohol.
En el año 2015 se publicó un meta-análisis que afirmaba que las personas con bajo nivel socio-económico tenían un riesgo de morir de una causa atribuible al alcohol de dos a cinco veces superior que las personas con un alto nivel socio-económico.
Numerosos científicos han tratado de dar una explicación a la citada paradoja y han llegado a la conclusión de que otros factores de riesgo como la obesidad y el tabaquismo podrían explicarla, ya que ambas son más frecuentes en individuos con bajo nivel socio-económico, además de la ingesta de bebidas alcohólicas.
Otro dato que aclararía la paradoja son las diferencias en el acceso a los servicios de salud que tienen en muchos países las personas de bajos ingresos con respecto a las clases sociales más favorecidas.
el pasado 28 de Noviembre la Comisión Europea publicó el informe titulado “Estado de Salud en la UE 2019” sobre la salud en los 28 estados miembros de la Unión Europea, más Noruega e Islandia?
La EU (Unión Europea) tiene 511.876.000 habitantes, mientras que nuestro país solo tiene 46.593.000 habitantes. El PIB per cápita en el EU es de 30.000 euros, y el de España 27.600 euros. La tasa de fertilidad es de 1,6 en la UE y de 1,3 en nuestro país. La tasa de desempleo es de 7,6 en la UE y de 17,2 en España.
Pero en este pequeño artículo nos vamos a centrar en lo que dice el citado informe a cerca de la salud en nuestro país.
El gasto sanitario español es de 2.371 euros por persona y año, mientras que el gasto en salud en el resto de los países del informe la media de gasto es de 2.884 euros per cápita anualmente. Los países que más gastan en sanidad son Noruega, Alemania, Austria, Suecia, Países Bajos, Dinamarca y Francia, por ese orden.
En España hay 3,9 médicos por cada 1.000 habitantes, una cifra superior a la media de la UE, y la sanidad es universal y gratuita.
El primer dato bueno es que España tiene la esperanza de vida más alta de estos treinta países (83,4 años), en concreto los españoles tienen 2,4 años más de vida que la media de la UE, viviendo las mujeres 5,5 años más que los hombres. Siguen a nuestro país en cuanto a esperanza de vida Italia, Francia, Noruega, Islandia, Suecia, Malta y Chipre. Las tasas de mortalidad por causas evitables en nuestro país son de las más bajas de la UE; ocupamos la cuarta posición por detrás de Chipre, Italia y Malta.
Pero lo que no es tan bueno es que el 60% de las personas mayores de 65 años padece alguna enfermedad crónica. El infarto de miocardio, ICTUS y cáncer de pulmón son las principales causas de muerte. La buena noticia es que estamos por encima de la media europea en supervivencia en cáncer.
Algo curioso es que según el informe las personas con mayor nivel educativo tienen más esperanza de vida que las que tienen un nivel educativo más bajo. Se atribuye esta diferencia a que en los niveles educativos más bajos hay más obesidad y tabaquismo.
En cuanto al hábito de fumar el 22% de los españoles fuma a diario, mientras que la media de los países de la UE es del 19%. También en obesidad salimos mal parados: en España el 17% de la población es obesa, mientras que la media de UE es del 15%. pero afortunadamente el consumo de alcohol es más bajo que