¿ Sabías que…..
experimentar una amplia gama de emociones tiene un efecto positivo sobre las inflamaciones ?
Lo anterior reviste gran importancia en aquellas enfermedades que cursan con cierto grado de inflamación en algún tejido del organismo. Por ejemplo, en algunas enfermedades del corazón, en el reumatismo, la diabetes, etc.
Por anteriores investigaciones ya era sabido que sentir alegría o sentirse feliz era beneficioso para la salud, pero un reciente estudio ha encontrado que esos beneficios también se obtiene con otra emociones, por ejemplo el “sentirse orgulloso de uno mismo”.
En la citada investigación, dirigida por Anthony Ong de la Universidad de Cornell, participaron 175 adultos a loa cuales se les pidió que durante un mes escribieran diariamente las emociones que habían experimentado a lo largo del día. Los investigadores les pidieron también que registraran la frecuencia e intensidad de dichas emociones.
Las emociones que podían experimentar se agruparon en 16 emociones positivas y 16 negativas. Entre las positivas estaban “estar emocionado”, “sentirse a gusto”, “estar interesado en algo”, etc. Y entre las negativas se indicaban “estar asustado”, “estar molesto”, “estar nervioso”, etc.
A los seis meses se les realizó un analítica sanguínea para detectar marcadores de inflamación como la Proteína C reactiva, la Fofolipasa A, la Ceruloplasmina, el Fibrinógeno, etc.
El resultado fue que en las personas que experimentaban las emociones negativas los marcadores de inflamación eran más elevados. Y en el grupo de las emociones positivas los marcadores de inflamación eran más bajos en las personas que sentían dichas emociones más intensamente y con más frecuencia.
El profesor Antony Ong es un experto en el estudio de las emociones, y ha publicado en los últimos años numerosos estudios acerca de este tema en prestigiosas revistas científicas. Aprovechamos este post para recomendar su interesante libro titulado “Emotion, Aging and Health” (Emoción, envejecimiento y salud) escrito en colaboración con Corinna Löckenhoff.
(Editado por la Dra. Moya Guirao)